Canción de Nueva York

Marc Webb, nacido en Indiana (EE.UU.) y director de esta reciente producción norteamericana, inició su labor artística en el campo del cortometraje y sobre todo en el del vídeo musical, especialidad con la que llegó a dirigir más de 100 videoclips. Debutó en el campo del largo en el año 2000 con la película días juntos, nominada a dos Globos de Oro y, más recientemente, con The amazing Spider-Man (2010) y Un don excepcional, anterior a la que hoy nos ocupa.

Con Canción de Nueva York, en la que ha dispuesto de un casting de auténtico lujo en el que destacan la veteranía de los ya famosos Jeff Bridges y Pierce Brosnan, nos ofrece, a la par que una elegante visión de determinados aspectos de la ciudad de los rascacielos, un particular entramado de vivencias familiares centradas en el joven Thom, en una interpretación sobresaliente del actor Callum Turner, personaje en acción casi permanente en toda la extensión de la cinta.

Curiosamente, Thom vive sensiblemente apartado de las vicisitudes familiares, motivo por el cual ignora la mayor parte de la problemática que rodea a sus mayores, hasta que una casual amistad sentimental con Johanna (Kate Beckinsale) le abre los ojos a un futuro desconocido que le trastorna y le sitúa en una nueva faceta de su existencia que da un vuelco total a la realidad que estaba viviendo.

Canción de Nueva York, quizás sin proponérselo formalmente, delata ciertos aspectos de la vida de una juventud, ansiosa de nuevas teorías y formas vitales, aunque desconocedora a posta de una realidad familiar que ignora pese a que íntimamente le inquiete y desasosiegue.

Un reflejo vital que la gran pantalla denuncia con imágenes sibilinas.

Firma: Joaquín Guitart