Volvemos a disfrutar con una animación realizada con plastilina y unos personajes ingeniosos que viven en un mágico lugar que solo puede existir en la mente de sus creadores y, ahora, de su audiencia.
Volvemos a disfrutar con una animación realizada con plastilina y unos personajes ingeniosos que viven en un mágico lugar que solo puede existir en la mente de sus creadores y, ahora, de su audiencia.
Sin desmarcarse demasiado de las otras series infantiles, esta colaboración entre Francia y Australia nos trae situaciones divertidas y muchas sorpresas.
España y Francia colaboran en la realización de Rocky Kwaterner y obtienen como resultado un producto distinto, campechano y optimista.
Protagonistas risueños, argumentos inocentes y una tonadilla alegre. Lobo es una propuesta ideal para preescolares.
Uno de esos productos que, a pesar de su contenido claramente adulto, se sigue ofertando a la audiencia infantil.
Mezcla de animación y personajes reales, esta serie destaca por la creatividad de sus dibujantes y por sus amables protagonistas.
Esta animación es una acertada y entrañable revisión de la clásica Familia Telerín.
Ya sabemos que el formato animado no implica que sea infantil y eso es lo que le ocurre a este título algo loco, divertido y disparatado, pero con muchas segundas lecturas.
Mr. Magoo es el remake de una serie de animación de los años 50. Aunque se ha modernizado en algunos aspectos, mantiene su esencia, por lo que gustará tanto a mayores como pequeños.
Sencilla y alegre serie de animación que, a pesar de sus buenas intenciones, resulta especialmente ruidosa.