Él me llamó Malala

Crítica Él me llamó Malala

Análisis

David Guggenheim dirigió en 2006 Una verdad incómoda, sobre la campaña de Al Gore del cambio climático, que ganó el Oscar al mejor documental y también a la mejor canción original. Esta vez, durante dieciocho meses, ha seguido a Malala Yusafzai mientras impartía sus conferencias, lo que le ha permitido recoger un jugoso material.

Malala, dentro de su singularidad, es una chica normal. Alegre, lista y algo tímida, se pelea con sus hermanos como todo el mundo y le da pereza ayudar en las tareas de la casa. A ella lo que le gusta es debatir, escuchar y sacar buenas notas, como hacía en Pakistán. Ahora sigue esforzándose para estar a la altura de la exigente escuela inglesa a la que va. Es fan de Brad Pitt y Roger Federer.

Ha escrito su propia biografía (I am Malala, en la que se basa la película) y a menudo debe ir al médico por el dolor y las heridas que le dejó el brutal tiroteo del nueve de octubre de 2012. Tampoco es fácil lidiar con la fama y adaptarse a otra cultura e idioma, dejar la vida y los amigos atrás, sabiendo que no puede volver. Allí, aparte de incondicionales compatriotas y niñas admiradoras de su causa, también hay gente que dice que en Pakistán hay muchas otras chicas como ella; un tema por el que el documental pasa de puntillas.

El diseñador Jason Carpenter nos lleva a través de sus suaves dibujos animados –combinados con entrevistas e imágenes de archivo– por la vida de Malala y su familia. Al principio, sabemos que recibe este nombre de la leyenda del siglo XIX que inspiró a su padre cuando iba a nacer. Él ya presentía que sería una niña especial, pues Malalai era una mujer pastún que alentó al ejército afgano durante la guerra contra los británicos para que no se rindieran y, de hecho, murió por ello.

Y así ha sido. Malala es una niña inquieta, inteligente y valiente y, desde pequeña, se cuestiona todo: su religión, la posición de la mujer en el islam… Ella quería ser libre y su padre se lo fomentó.

En este sentido, por un lado, Malala afirma que su padre no eligió su vida, que solo le dio el nombre y, por el otro, dice que si hubiera tenido un padre y una madre normales ahora tendría dos hijos. Por eso, se echa de menos cerrar esta reflexión en el film, pues aunque fue ella, evidentemente, la que decidió unirse a la lucha pacífica, esta lucha fue empezada por su progenitor; quien la ha criado y la ha ido guiando para llegar a ser quien es.

Así, igual involuntariamente, la idea que reluce es que el verdadero protagonista (en la sombra) es el que la llamó Malala, como acertadamente señala el título. En este caso, detrás de una gran mujer ya se ve que hay un gran hombre.

Cierta privacidad y subjetividad –totalmente respetables– se mantienen en el film, en el que no llegamos a profundizar del todo en los personajes, por lo que el sabor final es de suspicacia positiva. Tras el retrato realista y cercano de Guggenheim, de la vida pública y privada de la joven activista, aparece el toque emocional y en el fondo (de toda la cinta) promocional. Quizás no tiene más, pero surgen ciertas preguntas al filo del relato: siendo una película alrededor de la mujer, ¿por qué su misma madre queda al margen de la historia?

Aunque el metraje es ajustado –algo que ya es una valorada virtud, el montaje es lento en algún tramo. Pasando esto por alto, es inspiradora y bonita, muestra una realidad que deberíamos sentir –cada uno– como cercana e implicarnos más desde Occidente.

Malala se ha convertido en altavoz de un conflicto, misión que está cumpliendo y que supone toda una lección para más de uno. Ella quiere que la gente aprenda de la experiencia que tuvo y es consciente que representa a esos 66 millones de niñas que no tienen acceso a una educación digna. Una chica con fuerza, que cuando habla transmite lo que lleva dentro. “Un niño, un profesor, un libro y un bolígrafo pueden cambiar el mundo». El tiempo lo dirá.

Firma: Begoña Arribas

ficha técnica

Director: Davis Guggenheim

Guionistas: Davis Guggenheim

Intérpretes: Atal Yousafzai, Khushal Yousafzai, Malala Yousafzai, Toor Pekai Yousafzai, Ziauddin Yousafzai

Género: Documental

País: -

Fecha estreno: 06/11/2015

Lenguaje: Coloquial

Público

+12 años

Valoración

Contenido

Humor

Acción

Violencia

Sexo

Valores

Malala Yousafzai fue atacada por los talibanes cuando regresaba a su casa en el autobús escolar. La entonces adolescente de quince años fue señalada, junto con su padre, por manifestarse a favor de la educación de las niñas. Sobrevivió milagrosamente y ahora es una destacada defensora de la educación femenina en todo el mundo. La joven pakistaní ha sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz a sus diecisiete años.

Título original: He named me Malala

País: -

Duración: 87'

Fecha producción: 2015

Distribuidora: Fox

Color: Color

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