En el amor y en la guerra

Como puede apreciarse por el argumento, se trata de un episodio de la vida del famoso escritor norteamericano, que el mismo Ernest Hemingway había semi-autobiografiado en su novela Adiós a la armas. Si esta historia de amor ya fue llevada a cine en dos ocasiones (Frank Borzage, en 1933, con Gary Cooper y Helen Hayes; y Charles Vidor, en 1957, con Roch Hudson y Jennifer Jones), ahora se han tomado los recientes diarios de Agnes von Kurowsky vertidos en la obra Hemingway in Love War para construir un filme romántico sobre aquellos recuerdos del desaparecido novelista. Con unos escenarios naturales perfectamente reconstruidos, la ambientación es lo mejor de la película, el veterano realizador de biopics Richard Attenborough (El joven Winston, Gandhi, Chaplin, Tierras de penumbra) ha logrado evocar con creces una época, pero le ha faltado genialidad artística en su recreación histórica. Con todo, destaca el trabajo de Chris O´Donnell (Esencia de mujer) en su papel del joven Hemingway (19 años); mientras que la nueva novia de América, Sandra Bullock, encarna con precisión a la dubitativa y soñadora Agnes (26 años).

No obstante, quienes piensen ver en esta película-río una obra de rigurosa reconstitución histórica están bastante equivocados. Sir Richard Attenboroug y sus guionistas Allan Scott y Clancy Sigal se centran en la aventura romántica de la pareja protagonista que incluye una tórrida escena erotismo “de lujo”, sin llegar a profundizar en el contexto bélico-social, ni en el drama humano y político de la Gran Guerra. Los autores apenas apuntan el estudio de mentalidades, aunque sí saben sacar fruto al cuadro de intérpretes secundarios y figurantes.

En cambio, se retrata con brillantez la figura del futuro Premio Nobel de Literatura, cuyo carácter quedó marcado por su aventura sentimental con la Von Kurowsky, hasta su posterior suicidio en 1961. De hecho, a su lado, estaban las cartas de amor de Agnes, cuarenta años después. En este sentido, O´Donnell manifestó haber leído todas las biografías del malogrado escritor, personaje apasionado como pocos; mientras el británico Attenborough comentaría así el final abierto del film: “Permite demostrar que las relaciones humanas, los errores, las debilidades de cada hombre, las pasiones y la adrenalina se disparan ante el peligro y la inminencia de la muerte. Y ahí era ridículo un happy-end. Hemingway no admite un final feliz”. Pero, esta vez, Sir Richard (74 años) para un sector de la crítica, heredero del maestro David Lean, no ha estado muy inspirado.

Firma: Josep Maria Caparrós

Extras DVD:

• Audio: Dolby Digital 2.0 inglés, castellano, alemán
• Subtítulos: castellano, finlandés, danés, sueco, portugués, noruego, holandés