En la playa sola de noche

Hong Sang-soo (Ahora sí, antes no, En otro país, Lo tuyo y tú) no abandona sus grandes señas (las líneas argumentales mínimas, las divagaciones físicas y verbales y la confusión voluntaria de algunos paradigmas como el del tiempo) aunque apacigua su conexión con el tono Woody Allen.

Esta vez, impulsado por una experiencia personal similar, el director coreano se adentra en la personalidad convulsa e inestable de una joven actriz marcada por una relación amorosa.

Para ello, la rodea de espacios, personas y situaciones que están al servicio de un guión de temperaturas cambiantes en los diálogos y de rincones muertos que pretenden significar. Con ello, y a pesar del esfuerzo de Kim Min-Hee (ganadora del premio en la Berlinale) la película queda lejos de varios frentes: una trama más completa y densa (la anécdota se nutre de algunos, pero no suficientes, sagaces reflejos de heridas emocionales) y una mayor conexión con el interés general del espectador.

Firma: Lourdes Domingo