Nos veremos en el infierno

Con un notable retraso llega a las salas el nuevo trabajo de Martín Garrido, autor de una filmografía algo anónima que incluye despropósitos como H6: diario de un asesino. Filmada en 2011, Nos veremos en el infierno es una nueva incursión en la figura del psicópata que, fruto de la casualidad o de la estrategia comercial, coincidirá en carteleras con la infinitamente más lograda Caníbal, de Manuel Martín Cuenca.
 
Resulta difícil encontrar un lugar por donde coger a este thriller pueril e inconcebible para alguien que se tome con un mínimo de seriedad al espectador. Garrido se muestra torpe a la hora de construir una historia que lo único que parece tener claro es su voluntad de seducir vendiendo una sordidez casi tan caricaturesca como los personajes de la película. Lo demás es simple relleno al servicio de esta intención, una trama ramificada caprichosamente hacia temas que poco importa qué aporten al conjunto del film (como la cuestión de la homosexualidad del padre del protagonista), cómo se cierren (véase el insultante desenlace de la trama policíaca) o la calidad que tengan.
 
Firma: Juan Xipell