Samba

Los directores Eric Toledano y Olivier Nakache siempre dirigen juntos y en sus últimas películas han contado con el actor Omar Sy. Este trío saltó a la fama a nivel mundial con el estreno de Intocable (2012), aunque ya se habían unido para colaborar anteriormente en dos películas como Aquellos días felices (2006) y Tellement proches (2009), y para realizar el cortometraje Ces jours heureux (2002).

Tuvimos la suerte de estar en el pase de prensa con los directores, que explicaron que sus producciones se basan en la comedia italiana de los años 60, momento en que el cine pasó de ser un pasatiempo a mostrar la realidad de forma cómica. Desde este estilo, los directores siguen fieles a los temas que les gustan, apostando siempre por profundizar en la dimensión social del ser humano.

Samba se desarrolla una vez más en Francia, un país con grandes flujos de inmigración y, tristemente, con un creciente sentimiento xenófobo. Nos muestra, pues, una realidad muy conocida también en nuestra sociedad. No obstante, en cualquier sitio donde se proyecte, puede incitar a reflexionar sobre la situación que rodea a las personas que entran en un país de forma ilegal.

Desde la primera escena, nos adentramos en el dualismo que despliega el guión: la difícil unión y el contraste de los dos mundos que habitan por nuestras calles. Para ello, Eric Toledano y Olivier Nakache no maquillan la realidad pero tampoco la radicalizan con tintes de tragedia o un exceso de sentimentalismo. La humanidad de sus personajes está en primer lugar, en la puesta en escena, para impulsar una natural reflexión por parte del público.

El amor y la amistad jugarán un papel clave en el desarrollo de las tramas. Concretamente, en la evolución de cada uno de los protagonistas y también de los personajes que les rodean. Se crea un vínculo, una red, en la cual cada uno aporta algo bueno que permite a alguien poder cambiar a mejor.

En este sentido, el hablar abiertamente de los problemas es esencial para que vayan dando pasos hacia el buen camino; algo que nos invita a reflexionar, pues si a unos desconocidos les cambia la vida, compartir las dificultades y pedir apoyo a los que nos rodean servirá para fortalecer el vínculo existente.

Es obligatorio destacar que el equipo de Samba es el primero en rodar en un centro de detención de un aeropuerto. De hecho, una parte de la película se desarrolla en el París-Charles de Gaulle, lo que permite encuadrar allí el origen de todo lo que se desarrollará a continuación.

La riqueza de Samba reside, esencialmente, en la complejidad de los personajes, que se va descubriendo a medida que avanza el metraje. Su evolución es sutil, pero acaba siendo una evidencia.

Firma: Montse Figuerola