Es curioso comprobar cómo cuando la cultura no cuenta con subvención surgen productos de alta calidad como esta Stockholm de Sorogoyen financiada mediante crowdfunding.
Un guión clásico de inicio, con muchos rastros de Antes del amanecer de Linklater, que se desgaja hacia la mitad para crear lo que parece otro film distinto, cambiando incluso el tono y la luz. Un recurso que aporta poder al relato y refuerza la extraña perplejidad que aún podemos sentir ante la utilización de la persona como capricho.
Retrato hiperrealista, película provocadora, oculta bajo un manto de cotidianidad que expresa, entre fotogramas de gran intensidad, la esquizofrenia con la que vivimos las relaciones, la búsqueda del afecto y el vacío que queda tras errar el tiro (regusto amargo marca Hanneke).
Inmensa Aura Garrido en un papel creíble y cercano y grande, Pereira, encarnando a un tío corriente. Aunque sea culturalmente incorrecto decirlo, estamos ante una película profundamente pedagógica para adolescentes de instituto y peterpanes desnortados. No es una calificación despectiva. Todo lo contrario. Al fin, alguien del talento de Sorogoyen idea un producto de gran calado para ese target tan abandonado. Los jóvenes y adolescentes que se inician en los mecanismos de las relaciones humanas, con sus fragilidades y sus anhelos, tienen aquí buen material para darle un par de vueltas.
Firma: Anna Puigarnau
Director: Rodrigo Sorogoyen
Guionistas: Rodrigo Sorogoyen
Intérpretes: Aura Garrido, Javier Pereira
Género: Drama
País: España
Fecha estreno: 08/11/2013
Lenguaje: Coloquial
El simpático de la fiesta conoce a la guapa huraña e inicia un trabajo que dura toda la noche para convencerla de que es un tipo de fiar, víctima de un flechazo. La realidad amanecerá cruda con la luz del día.
Título original: Stockholm
País: España
Duración: 92'
Fecha producción: 2013
Distribuidora: Festival Films
Color: Color