Violette

Película íntima y descriptiva hasta el intrínseco interior de una mujer vacía y sin futuro, marcada por la vida desde su origen y con afectos temporales sin poso alguno; en una existencia en constante desilusión, acrecentada por las más perentorias necesidades, sin rumbo y con escasas posibilidades.

Este nuevo film del director Martin Provost, a quien recordamos por Seraphine, es en su contexto un compendio de melancólica frustración en una mujer, Violette, que carece de todo tipo de estímulos hasta que la escritora Simone de Beauvoir se cruza en su camino, valorando sus innatas posibilidades en el campo de la escritura y la narrativa. Ante esta nueva apuesta, Violette mezcla el favor con la urgente necesidad de afecto, creando un vínculo especial entre las dos mujeres.

Violette es cinematográficamente como una ópera, sin arias pero con libreto, y además dividida en varios actos que marcan las diversas fases en las que la condición femenina de la protagonista expresa sin limitaciones sus ansias y sus carencias.

Con expresa intención, el director Martin Provost conjuga al mismo tiempo palabras y silencios, dando especial importancia a los sonoros pasos de las protagonistas sobre los parquets de los distintos escenarios interiores, creando la atmósfera de manifiesta realidad que el guión exige

En suma, un film “diletante”, para públicos comprometidos con encrucijadas culturales en tiempos de profundos y controvertidos cambios en el panorama de los círculos literarios franceses, en los que una mujer, después de una vida vacía, comienza a vislumbrar un nuevo amanecer.

Y es que el cariño y la comprensión siempre abren nuevos horizontes.

Firma: Joaquín Guitart