Joe Carnahan trae a la gran pantalla un thriller policíaco repleto de acción. Aunque resulta poco innovador, su conjunto es efectivo, entretenido y placentero. Sin duda, es un visionado que merece la pena.
Joe Carnahan trae a la gran pantalla un thriller policíaco repleto de acción. Aunque resulta poco innovador, su conjunto es efectivo, entretenido y placentero. Sin duda, es un visionado que merece la pena.
Una nueva reedición para PS5 y XBox Series de un juego tan violento como inadecuado en contenido.
Esta secuela contaba con un material muy prometedor que quizá no llega a explotar del todo. Aun así, es una película con un elenco magistral y unos efectos apabullantes que la hacen gratamente satisfactoria.
A pesar de ser, en ocasiones, demasiado sensiblera y tragicómica, se trata de un gran trabajo técnico de reconstrucción del incendio, con una narración angustiosa que honra a las personas corrientes que ayudaron a sofocar el fuego.
Bay ofrece un gran espectáculo visual, repleto de acción trepidante y grandes explosiones. No obstante, un guion endeble junto con unos personajes poco creíbles construyen un sinsentido que se alarga más de lo debido.
Cine de pasatiempo divertido que mezcla comedia, aventuras y romance. Si bien repite una fórmula conocida, funciona gracias a una gran química entre los protagonistas, una premisa original y una buena ejecución.
La propuesta de Vicente Villanueva carece de trama, personajes, diálogos originales y un guion coherente. Se limita a plantear una sucesión de escenas morbosas que podrían constituir perfectamente una película porno.
Si uno no se deja llevar por lo que el tráiler promete, podrá encontrar en Morbius una buena película de acción, que reutiliza todos los ingredientes de las películas de Marvel de manera muy correcta, pero sin aportar novedad.
Una nueva franquicia se abre paso. SEGA da continuidad a las aventuras luminosas y algo estridentes de su erizo azul. La propuesta aúna valores tradicionales con un ritmo frenético y unos cuantos estereotipos.
Martin Campell y Richard Wenk remozan un poco las tramas de acción, con asesinas implacables, aunque sin mucho riesgo. El resultado es entretenido en lo visual y algo fallido en lo narrativo.