Waititi regresa con su humor extravagante en esta adaptación de una historia real con un largo repertorio de valiosos mensajes. Al margen de ello, el desequilibrado y previsible guion merma las posibilidades del conjunto.
Waititi regresa con su humor extravagante en esta adaptación de una historia real con un largo repertorio de valiosos mensajes. Al margen de ello, el desequilibrado y previsible guion merma las posibilidades del conjunto.
Los creadores de ‘Gru mi villano favorito’ nos presentan una historia que no sorprende por su temática, pero consigue no decepcionar y resulta una película divertida y entretenida, perfecta para ver en familia.
Con seiscientos mil seguidores tan solo en su cuenta de instagram, Jorge Amor, un joven creador, conecta fácilmente con su comunidad gracias a su naturalidad y su contenido humorístico.
Un remake de la exitosa película ‘Campeones’ de Javier Fesser totalmente innecesario. La adaptación al estilo americano provoca la pérdida de todo lo bueno que ofrecía la española.
Paul King presenta un entrañable musical sobre los inicios de Willy Wonka. Con un gran reparto liderado por un carismático Timothée Chalamet, los números musicales y los valiosos mensajes le ponen la guinda al pastel.
Presentada como parte de la exitosa saga de Ocho apellidos, con la que tiene muy poco que ver, esta tercera entrega viaja de Cantabria a Marruecos, en una parodia tan simplona como anticuada.
Las interpretaciones de Peter Dinklage, Anne Hathaway y Marisa Tomei quedan desperdiciadas al servicio de una mezcla incoherente de subtramas que quieren abarcar más de lo que pueden.
La ópera prima de Charlotte Regan es una historia alrededor de una relación paterno-filial que desprende ternura e inocencia. A pesar de que es irregular y predecible, llega a conmover y deja al espectador con una sonrisa.
Asha, Valentino, Estrella y el resto de habitantes del reino de Rosas llegan con una historia mágica y sencilla para todos los seguidores de Disney. Sin ser memorable, resulta tierna, encantadora y luminosa.
Lo que comienza como una crítica al consumismo y al capitalismo, acaba deviniendo un slasher previsible que disfruta haciendo hincapié en sus escabrosas escenas y disfrutando morbosamente de las matanzas perpetradas.