Segunda entrega cinematográfica de la oveja televisiva, ahora ya en la gran pantalla. Menos lustrosa que la de 2015, se trata de un film divertido, bien diseñado y con los valores de la marca Aardman.
Segunda entrega cinematográfica de la oveja televisiva, ahora ya en la gran pantalla. Menos lustrosa que la de 2015, se trata de un film divertido, bien diseñado y con los valores de la marca Aardman.
Un trabajo que fusiona de manera inteligente el fondo y la forma. Bong Joon-ho dirige una cinta mayor con una agridulce profundidad, en un género sorprendente y cercano a la novela picaresca.
Dos rutinas que confluyen en los mismos lugares, pero sin percatarse, dan vida a la nueva cinta de Cédric Klapisch, que, ambientada en París, combina escenas de humor con diversas reflexiones.
Vuelven Fétido, Lurch, Cosa y el resto de los Addams en una aventura animada que, aunque simple y previsible, está pensada para divertir tanto a niños como adultos a la vez que evocar nostalgia en sus fans.
Ruben Fleischer y dos de sus guionistas regalan a los fans una nueva entrega de esa curiosa mezcla de humor y vísceras, con moraleja. Con todos los puntos a favor y en contra de lo habitual del género.
Esta ópera prima de Santiago Requejo viene avalada por la experiencia de su elenco. Además, el tema que aborda, con seriedad y sentido del humor, ofrece varios buenos motivos para ver el film.
Una película de animación de producción paquistaní, que los niños disfrutarán por su entretenida trama, pero en la que los adultos verán una crítica a la sociedad actual.
Anne Giafferi dirige una historia convencional y sin pretensiones acerca de reemplazos de personalidad, con un reparto preciso, que resulta en una propuesta entretenida con algunos toques de humor.
Una comedia francesa que viene de la mano del director de la eficaz La vaca. Ofrece un elenco liderado por Gilles Lellouche y un conjunto de situaciones que, como mínimo, nos harán sonreír y, ocasionalmente, reír.
Una comedia-musical, con drama incluido, que maneja los géneros con una curiosa y no siempre eficaz interacción. Eso sí, su argumento en pro de la conciliación entre generaciones es meritorio.