Un perro y un robot protagonizan esta entrañable película de animación muda que está ideada tanto para los más pequeños como para adultos. Narra una encantadora historia que es un elogio a la vida y a la amistad.
Un perro y un robot protagonizan esta entrañable película de animación muda que está ideada tanto para los más pequeños como para adultos. Narra una encantadora historia que es un elogio a la vida y a la amistad.
La reciente Palma de Oro en Cannes es un análisis anatómico de la imagen para indagar en la verdad y las relaciones de pareja. La directora construye loablemente el drama y el suspense, sin saber darle un cierre a la altura.
DK y Hugh Welchman presentan un proyecto muy ambicioso después del éxito de Loving Vincent. Sin embargo, la estética que aporta la pintura al óleo no acaba de ir al unísono con la novela.
Las interpretaciones de Peter Dinklage, Anne Hathaway y Marisa Tomei quedan desperdiciadas al servicio de una mezcla incoherente de subtramas que quieren abarcar más de lo que pueden.
Una gran épica que se aproxima a la figura de Napoleón y a su relación amorosa con Josefina. El superficial y, a veces, tedioso devenir de los acontecimientos encuentra su atractivo en el trabajo de Phoenix y Kirby.
La ópera prima de Charlotte Regan es una historia alrededor de una relación paterno-filial que desprende ternura e inocencia. A pesar de que es irregular y predecible, llega a conmover y deja al espectador con una sonrisa.
Paula Ortiz lleva a la gran pantalla la obra de teatro La lengua en pedazos, basada en El libro de la vida de Santa Teresa de Jesús. El film es un cara a cara entre la potente actuación de Blanca Portillo y la de Asier Etxeandía.
Esta brillante película de David Zonana está cargada de intención y denuncia. Afortunadamente, no cae en los chilchés de la escuela militar y permite reflejar una realidad de muchos mexicanos.
Manuel Martín Cuenca se aleja totalmente del thriller para rodar un drama familiar sencillo y realista. En él, acompañamos de cerca a la joven Andrea por la bahía de Cádiz en su difícil camino a la madurez.
Carlota Pereda vuelve a apostar por el género de terror después de su éxito con Cerdita y nos ofrece una película que sorprende por su estilo, aunque no acaba de posicionarse al nivel de la anterior.