Missing muestra las infinitas posibilidades que ofrece la tecnología y lo fácil que es acceder a los datos personales de cualquiera. De todas maneras, intenta abarcar demasiados conceptos y los giros resultan fallidos.
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La obra de Salle funciona bien como thriller. Tiene una gran capacidad para mantener la intriga durante toda la película y la actuación de Lellouche consigue hacer a Mathieu creíble. El único problema es que es demasiado larga.
Pese a tener todos los componentes para ser un relato desgarrador sobre la pedofilia, Lobo feroz se centra demasiado en la violencia y termina derivando en una película que narra una tortura de manera muy explícita.
Un trágico relato sobre el odio, y las disputas que este desencadena, ambientado en un pequeño pueblo de alta montaña. A pesar de una gran interpretación de su actriz principal, una falta de precisión narrativa desprestigia la propuesta.
Daniel Craig protagoniza una secuela que ha perdido la frescura, los giros sorprendentes y los chistes agudos de la historia original. A pesar de ello, el largometraje es un thriller divertido que se disfruta igualmente.
Aunque poco explícito, Matadero resulta un largometraje violento y, en ocasiones, molesto. Santiago Fillol nos trae un título poco convencional y muy concreto que atraerá a un público reducido.
Acción y violencia por doquier para tapar una trama previsible y simple. Es una historia de redención que se ciñe a los estándares del género donde la actuación de Banderas tiene un gran peso para hacer la película interesante.
Un grupo de mercenarios secuestra por sorpresa una familia adinerada en Nochebuena. Santa, que se sale del cliché, aparece para ayudarles. El film regala mucha violencia cómica en una noche poco santa.
El menú dará al espectador una experiencia digna de la alta cocina. Con una mezcla de sátira y suspense adornado con una atmósfera perturbadora y un humor retorcido, será capaz de satisfacer hasta al paladar más exquisito.
El largometraje de Fredéric Tellier es una historia sobre la codicia y la falta de humanidad, presentes en las altas esferas sociales. Es un thriller que engancha, a la par que deja con mal sabor de boca.