Ansia de poder, egoísmo y traición en este drama que acaba disuelto por falta de intención y exceso de postureo.
Esta reinterpretación de Dorothy se queda en una especie de experimento de instagram en el que se valora más la estética para la foto que la historia que hay detrás. Es una cinta con muchos colores y poco que decir.
Una trama interesante para una evolución algo retorcida y un final cuestionable. Sin embargo, vale la pena apostar, por el entorno que plantea y la realidad que denuncia.
Una obra pequeña, que pretende mucho y en lo visual lo logra parcialmente pero fracasa en su argumento y narración.
Comedia de extrarradio que da una de cal y otra de arena. Aplaude esa figura de la mujer trabajadora y humilde, mientras eleva algunos de sus rasgos y de su entorno urbano a la máxima vulgaridad.
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