Cuando queremos estar conectados con los hobbies de nuestros hijos, hacemos esfuerzos titánicos, ya sea aprendiendo a jugar con sus juguetes o viendo películas un tanto “aburridas”. Sin embargo, cuando el tema gira en torno a videojuegos, tenemos la mente demasiado abierta, pensando que resultan completamente inofensivos. Sin ir más lejos, el año pasado recibimos algunos de los juegos más violentos, con propuestas como Gran Theft Auto 5 (GTA5), Saints Wow IV o Gears of War: Ultimate Edition. Curiosamente, muchos de ellos son jugados por menores de edad.
Ahora que llega la campaña navideña, os mostramos las propuestas que consideramos más violentas de este 2015.
1. Battlefield Harline (PS4, PS3, X360, XOne): con un planteamiento simple, basado en el juego de polis y cacos de toda la vida, formamos parte de una intensa refriega contra narcotraficantes. Las misiones están plagadas de violencia, con sangre que salpica continuamente, y las escenas cinemáticas muestran momentos grotescos y crudos. Es cierto que existe la opción de tomarnos las misiones por una ruta más tranquila, pero la esencia es sólo para adultos. Alternativas como Portal 2 (+10) o Metroid Prime (+12) son menos violentas.
2. Bloodborne (PS4): uno de los exclusivos más exitosos del año de Sony. Este juego de acción en tercera persona nos propone eliminar criaturas oscuras que fueron humanos hace muchos años. La sangre está por todos lados y a los combates no les falta ni un poco de crudeza. Ni no Kuni (+7) de PS3 o Xenoblade Chornicles 3D (+12) de 3DS son alternativas menos duras.
3. Dying Light (PS4, XOne): otro de los éxitos del año es este título basado en un apocalipsis zombi. A medio camino entre un shooter en primera persona, un survival horror y The Walking Dead, combinamos disparos y parkour (esa especie de gimnasia trepa-muros en plena calle) para intentar conocer el porqué de ese brote vírico. Es muy grotesco, sangriento y tremendamente explícito. Compartiendo la mecánica de mundo abierto de este Dying Light encontramos propuestas como The Legend of Zelda: Ocarina of Time 3D (3DS, +10) o Lego City Undercover (Wii U; +9), mucho más adecuadas a los más pequeños.
4. Metal Gear Solid V: The Phantom Pain (PS4, PS3, X360, XOne, PC): el broche final de una de las sagas más populares de los últimos 25 años es una entrega repleta de acción. En plena Guerra Fría, viviéramos el proceso de cambio en Naked Snake, que pasará de ser un héroe y leyenda militar a convertirse en uno de los terroristas más detestados y buscados del mundo. ¿Qué le llevará a este cambio? Pese a ser un gran juego de espionaje y acción en mundo abierto, es tremendamente violento y sangriento en su faceta jugable. Además, las escenas de video muestran torturas, mujeres ligeras de ropa e incluso vocabulario poco adecuado con estas.
5. Mortal Kombat X (PS4, XOne): siempre hemos defendido que, pese a que un juego sea de lucha, no tiene que ser inapropiado para todos los públicos. Evidentemente un Dragon Ball (+12) o un Naruto (+12), no tienen nada que ver con títulos como este. En Mortal Kombat los golpes parten costillas, brazos, piernas e incluso cuellos. Los Fatalities –las técnicas especiales- nos permiten ver cómo rompemos los huesos –a modo de radiografía- de nuestros adversarios. Eso por no contar con los atuendos poco adecuados de algunas luchadoras.
6. Until Dawn (PS4): pese a que este título no llama tanto la atención por su violencia jugable, es cierto que es un título claramente para mayores de edad. Se trata de la típica historia en la que un grupo de jóvenes son secuestrados y aparecen en una isla abandonada. Allí deberán luchar por sobrevivir y nuestras decisiones comportarán la vida o muerte de los demás. Más que violento en su mecánica, repetimos, es macabro –como cualquier película de terror- y hay algunas insinuaciones sexuales.