Flee es un documental animado que profundiza en las secuelas de un refugiado a través de una entrevista. La trama de autodescubrimiento queda interrumpida por momentos, pero es eficaz a la hora de mostrar la dureza de la huida.
Flee es un documental animado que profundiza en las secuelas de un refugiado a través de una entrevista. La trama de autodescubrimiento queda interrumpida por momentos, pero es eficaz a la hora de mostrar la dureza de la huida.
La película muestra con realismo lo que se cuece en la industria del cine porno de Los Ángeles. Su tono directo resta protagonismo y sutileza a los matices humanos que se intuyen en algunos pasajes.
El film de Christoffer Boe narra un conflicto matrimonial duro y utiliza en demasía algún recurso estético. Pero todo ello se salva gracias la esperanza que se consigue entrever en la segunda parte que deja un buen sabor de boca.
Thomas Vintherberg regresa con un relato sobre la confianza en uno mismo y la capacidad de control. Mientras rodea zonas ambiguas con una gran fuerza narrativa, deja el peso de la reflexión al espectador.
Hardiman crea una historia escalofriante que adquiere su fuerza de las actuaciones de los protagonistas. Sin embargo, pero el film carece de escenas que lo definan propiamente o solo como una película de terror.
Una historia sobre un grupo de chicos que practica la danza georgiana: sus amores, relaciones, éxitos y frustraciones. La película, que ha sido vetada en su país de origen, consigue transmitir una visión sincera y emocionante de sus protagonistas.
Una combinación de escenas muy diversas, inconexas entre ellas, que tratan de reflexionar acerca de la existencia humana. Gestos espontáneos, largos silencios, humor absurdo y tonos pastel remarcan el sello del director.
Sandberg ofrece un nuevo largometraje sobre aventureros históricos. Con una mezcla de realismo y rebajado tono épico, es una buena ocasión de conocer la conquista del Polo Norte.
El director turco, ganador de varios premios en el Festival de Cannes, ofrece una mirada crítica de la vida, desde el punto de vista de un joven que busca su identidad. Una película para los amantes del cine de festival.
Eloy Domínguez Serén presenta un documental en el que, con secuencias frescas y encantadores, la cámara acompaña a un grupo de jóvenes refugiados que luchan de manera creativa e inocente por vivir algo más fuera de sus circunstancias.