Henry, el monstruo feliz

Esta producción irlandesa, producida por ordenador en 3D, utiliza a la familia Abrazamosntruo para construir un entorno confiable y reconocible entre los más pequeños. Además de los padres y hermanos, y mascota incluida, en Henry, el monstruo feliz también tienen cabida los abuelos y la relación con ellos es siempre respetuosa y afectiva.

En un contexto cándido se desarrollan historias simples, pero no carentes de humor e imaginación. En cada episodio, el protagonista cuenta con la colaboración de sus amigos o familiares para aprender una lección que traslada con gracia a la pequeña audiencia.

Cada personaje posee un estilo definido, unos defectos y unas habilidades que le hacen ser especial y con las que debe contar para ser útil a los demás. En Villa Rugido todo es encantador: sus corteses habitantes, sus escenarios coloristas, sus imaginativas actividades y, allí, hasta el más pequeño incidente se convierte en una ocasión para colaborar con los demás, rectificar el carácter o disfrutar en compañía. 

También la música forma parte, de vez en cuando, de esta producción animada. La serie, dirigida al público preescolar, aporta grandes valores familiares, de convivencia, de esfuerzo y de sinceridad, entre otros muchos. 

Firma: Mar Pons