Este drama policial de la BBC aprovecha la evolución de los personajes para cautivar a su audiencia y hacer mucho más interesante la trama general.
El desesperado intento de Nell por rehacer su vida y buscar su lugar en el mundo conforma una sitcom divertida y bondadosa. De todas maneras, incluye algunas materias que se perciben forzadas y acaban cansando.
Un título de espionaje que prometía mucho y nos ha dado poco. Mucha acción, violencia y disparos y pocas oportunidades para asimilar la información. Pese a todo, consigue sorprender y nos hará pasar un buen rato.
Menos atractiva que su predecesora, esta segunda entrega sigue ofreciendo el lado más humano de un drama sobrevenido.
Un triángulo amoroso, un vídeo comprometedor y un asesinato cambian la vida de la joven Megan. Intriga y sexo son la apuesta segura para triunfar entre los adolescentes.
El reflejo de una infancia feliz, llena de aventuras y de cosas por aprender y descubrir. Edu y Lucy, además, promueve valores y una convivencia pacífica.
Después del éxito de la primera entrega, la serie regresa. Esta nueva temporada aporta menos novedades que la anterior, pero se ha dividido en dos partes de 5 capítulos cada una para crear más expectativa. Hay que esperar hasta el próximo 3 de agosto para el desenlace final.
Entretenida y ágil para los amantes de las series de acción, espías y líos a resolver. Engancha por su buen ritmo y algunos giros interesantes en el guion.
Si uno ha visto ya el crimen de la guardia urbana, es posible que solo pueda hacer críticas negativas a la producción de Netflix. Aunque es fácil de ver y cuenta con buenos actores, se aleja un tanto de los hechos originales que relata.
El hijo zurdo es un drama. Una de esas historias que se pueden ver para constatar que la vida de uno no está tal mal.